Comienzan un años más la semana de capeas de nuestra localidad, por segundo año consecutivo tenemos ocasión de ver como se transforma el espacio anexo al parque en toda una fortificación al estilo del viejo oeste y proseguimos con ese placer que nos otorga los martillos, serruchos, puntillas, tablas, tablones, palets, litronas, calor, refresco, tabaco, el buen rollo, la cervecita de endespués, las risas, la subasta, la queda, las charlas, los chiringuitos, el sombrerito, la varita, bastones, sardinas, etc, etc, etc.
En esta ocasión contamos con unas previsiones de cara a nuestros bolsillo no muy favorables, para algunos/as mejor que para otros/as, pero también es necesario el poder relajarse un poco con un buen ambiente que muchas veces poco tiene que ver con el dinero, por ello, desde mi persona quiero transmitir a mis paisanos/as que disfruten durante esta semana, que intenten aparcar todas las posibles situaciones adversas por las que atraviesan durante dicho periodo, que cada uno/a tenga la ocasión de poder saborear algunas de las posibilidades que se nos ofrecen con estas fiestas ( este año, digo, hasta nuestro ayuntamiento se dice resentir, pese a que para otras muy diversas cosas si que hay ), pero bueno, algo se encontrará para poder tener nuestra mente entretenida y, por unos momentos, fuera de las batallas diarias por las que atravesamos a lo largo de nuestras vidas.
Lo dicho, a disfrutar, a beber litronas, gaseosas, sangrías, a comer pipas, kikos, rebujos, gomitas, bocatas, a darle al palike, a fumar,,, a pasar calor, a tomar un pincho, sardina, lomo, a exclamar uy, ah,ah,ah, ay, ay, ay, pfua, eje, eje, ja,ja, ja, je torito, je torito, echale sa, a saludar primooooooo, mache, que pasa, vamoooooo, he, he, illo, a subir escaleras, cantar, aplaudir, en fin, que ustedes lo pasen bien y lo dicho, a tener la mente en otro lado.
Salud y república.